A pesar de que cambian los presidentes,
dentro de Cancillería, la cúpula del mal
se mantiene en el poder
La Embajadora Franca Deza, será recordada por haber sido Ministra de Relaciones Exteriores durante 3 días y porqué la única Resolución Suprema que firmó durante su encargo fue para nombrar, como Representante Permanente del Perú ante la
Organización de los Estados Americanos al aprofujimorista embajador Hugo Claudio de Zela Martínez. Todo esto, luego de la renuncia al cargo por parte de Vicente Zevallos, luego de que el presidente Vizcarra fuera vacado por el Congreso.
Cabe recordar que el gobierno de Vizcarra, presentó la postulación a
finales de noviembre del año pasado, a la secretaría general de la OEA,de Hugo de Zela. Dicha postulación, no encontró anuencia en las autoridades internacionales, tanto así que, de Zela renunció a la candidatura para evitar el inminente papelón. Al parecer es conocido, también en el exterior por su conducta abyecta, algunos han definido a de Zela certeramente, en las redes sociales, como "una culebra venenosa, que se se arrastra como tal y es traicionero como pocos". A eso se agrega, que con justa razón, lo llaman el perro faldero de Fujimori.
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En un comentario muy acertado el abogado de la Jara, en forma sintética, enumera algunos de los oscuros pasajes de la carrera diplomática de Hugo de Zela.
En el caso de la Deza destaca un grave incidente, en su último encargo en el
exterior, cuando manifestó públicamente su total solidaridad, al cónsul
honorario de Finlandia en Barcelona Albert Ginjaume, luego de que el
Ministerio de Asuntos Exteriores de España habría calificado la conducta
de éste, como
inadecuada e incompatible con su función y que causaba preocupación. La Embajada del Perú en España no apoyó los comentarios y zanjaron responsabilidades, declarando tajantemente que eran declaraciones a título personal de la Deza. La cancillería peruana evitó que se de difusión a este grave hecho, que es contrario al comportamiento diplomático, puesto que no se debe interferir en la política del país receptor, dando declaraciones controversiales, o tomando partido por facciones. Nada
diplomático el comportamiento insubordinado de la Deza.
Como conclusión se puede confirmar que cuanto más rapaz es el comportamiento del funcionario diplomático, más crecen las posibilidades de ascender y llegar a puestos de poder y comando. Por otro lado la población se queja por lo elevado de los sueldos de los congresistas, honorarios que reciben a lo largo de 5 años, sin embargo tenemos un entero Ministerio de funcionarios del Estado, con sueldos millonarios y que durante la mayor parte de su vida laboral gozan de inmunidad en el exterior.
